Día 15

20 Aug 2014

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Trayecto a Okayama

Nada mas despertar nos quedamos mirando un rato las impresionantes vistas desde el hotel.

Tras momentos de empano, salimos a dar una vuelta por Nanba y desayunar uno helado de dimensiones bíblicas. Nuestro destino para esa mañana era Okayama, así que cogemos las mochilas del hotel y nos vamos hacia la estación de tren. Una vez en el destino, dejamos todas las cosas en las taquillas de la estación y nos dirigimos al famoso castillo que domina la ciudad. Para llegar hasta él, nada más rápido que tomar el tranvía un par de paradas y subir una pequeña cuesta.

La leyenda de Momotaro

Antes de abandonar la estación, recordad tomar la típica foto con Momotaro, el protagonista de la Leyenda con el mismo nombre.

Castillo

Este castillo es un poco más animado que los demás, y dispone de algunas “atracciones” para turistas tales como vestirse con los trajes de gala de los señores feudales o subirse a los vehículos de la burguesía.

Korakuen

Junto al castillo, se encuentran los jardines de Korakuen. Es un paisaje precioso que merece la pena recorrer de lado a lado. Cuidado que algunas zonas tienen una población mosquitos más alta de lo normal.

De camino a Hiroshima

Volvemos a la estación de tren donde aprovechamos para cenar un poco de sushi y algunos bollos típicos franceses :).

Entre ellos descubro unos churros.

Cogemos el tren hacia Hiroshima, llegaremos tarde y con pocas ganas de danzar por la ciudad.